En modo ilusiÓN para alcanzar un sueño

Luis Alexcis Padilla. Persona acompañada por el Servicio Diocesano de Empleo y actualmente trabajador en Carrefour.

“Fijarse un objetivo a medio plazo y apuntar a él para alcanzarlo.” Es lo que hizo Luis quien, desde que llegó hace un año y medio de Perú junto a su mujer y su hijo hasta regularizar su situación y encontrar un trabajo que le permitiese vivir, ha recorrido un duro camino. Ha compaginado trabajos esporádicos, en turnos de noche, con estudios de logística y almacenaje. “Dormía poco”, pero le ha valido la pena. La oportunidad laboral llegó. Primero, como contrato de inserción en Laborafit –empresa de recogida y almacenaje de ropa- y, después, en forma de contrato fijo y a tiempo completo en la cadena de supermercados Carrefour.

En este camino se ha dejado a familiares y amigos en su país natal, muchas horas de sueño, y algún que otro miedo. También ha dejado atrás al Luis que fue. “El Luis de ahora nada tiene que ver con el Luis de Perú. El Luis de allá era tímido, le costaba abrirse a la gente. Aquí he aprendido a relacionarme y a hablar con todo el mundo”.

Pero en este caminar las ganancias han sido mayores que las pérdidas. Ha ganado en conexión con el mundo que le rodea. Conexión con personas a las que ha conocido en sus primeros trabajos que le abrieron otras puertas. Conexión con la parroquia a través de la cual lo conectaron con el Servicio Diocesano de Empleo y de ahí, con empresas. Y conexión con sus compañeros de trabajo, con sus vecinos y con su barrio, donde ahora se sienten “muy bien acogidos”. Son las conexiones humanas las que nos reconectan y reconcilian, de una manera cercana pero también realista, con la realidad que vivimos.

Le ha ayudado su carácter, afable, y su actitud, positiva. Luis sonríe con timidez, y le brillan los ojos cuando nos habla de esa meta a la que un día apuntó y que ha alcanzado. “He afrontado cada paso siempre con la mejor actitud posible, y con ganas. Sabía que no iba a ser fácil, pero no había otra”.

No ha sido tan fácil como darle al play, pero no ha sido un proceso tan complejo como cabría imaginarse. Puede que no represente a la mayoría, pero sí a un buen número de personas que, como él dice, “solo luchan por sus sueños”. Si rebobinamos atrás sin duda ha valido la pena ponerse en ‘modo ON’, ponerse en modo ilusión.